INTRODUCCIÓN. Mi cambio interior. Y la tarea de la maternidad.


Desde el punto de vista espirita, la llegada de un nuevo bebé está planificada por el mundo espiritual mucho tiempo antes de lo que nosotros pensamos.
Tras mi experiencia personal, ahora consciente de todas estas cosas, he de confesar que para traer un bebé al mundo, los espíritus tuvieron que prepararme antes para la tarea, la cual, siendo sincera, no tenía todavía asimilada para realizar en esta existencia.

Primero, tuvieron que cambiar mi vida, yo no era una mala persona pero mi vida era un poco materialista, solo me importaba mi forma exterior (la cual tenía miedo a perder). Esto era debido a un gran problema de autoestima que había tenido durante toda mi existencia y que al final, me había llevado a ser una persona un tanto egoísta y superficial en mi forma de pensar ante la posibilidad de tener hijos.

Todavía no había llegado el momento de darme cuenta de la importancia de otras cosas mayores. De experimentar el gran mundo espiritual que hay a nuestro alrededor el cual nos hace la vida mucho más bella.

De manera, que, a través de una pequeña carta recibida, con las palabras de un pequeño espíritu familiar, en un determinado momento, cambio mi perspectiva sobre el mundo y mi vida se volvió más espiritual y más llena.
Ello, me enseño a apreciar muchas cosas importantes y poco a poco, descubrir que la tarea de la maternidad requería mucha responsabilidad,  aparte de ser una tarea muy necesaria por el hecho de dar una nueva oportunidad a otros espíritus para poder reencarnar.

El ofrecer nuestro vientre para dar la oportunidad de reencarnar un espíritu, es una caridad que realizamos para otros espíritus en misión o prueba. Es una nueva oportunidad de redención para ellos y para nosotros. Y debemos dar gracias al padre por su confianza en que podamos realizar estas máximas.

Saltando el cambio que se realizó en mi persona y la evolución hacia la espiritualidad, voy a comenzar a narrar, desde el día que decidimos mi marido y yo, traer a la vida a un nuevo ser.